Cómo cultivar albahaca a partir de semillas

Siembra de las semillas

Las semillas de albahaca son muy pequeñas, por lo que es recomendable sembrarlas en macetas pequeñas o en una bandeja de germinación. Cubre ligeramente las semillas con tierra y riega suavemente.

Cuidado de las plántulas

Una vez que las semillas hayan germinado, mantén las plántulas en un lugar cálido y soleado. Asegúrate de mantener el suelo ligeramente húmedo, pero no empapado.

Trasplante y cuidado continuo

Cuando las plántulas tengan al menos 6 pulgadas de altura, estarán listas para ser trasplantadas al jardín o a macetas más grandes. La albahaca prefiere un lugar soleado y suelo bien drenado. Mantén el suelo húmedo y retira regularmente las hojas marchitas.

Disfruta de tu cosecha

Una vez que la albahaca esté bien establecida, podrás disfrutar de cortar hojas frescas para tus recetas. ¡Recuerda que la albahaca es aún más aromática cuando se cosecha justo antes de su uso!

Mantenimiento y conservación

Para prolongar la vida de tu planta de albahaca, asegúrate de pinzar las flores para fomentar el crecimiento de nuevas hojas. También puedes secar las hojas para su conservación.

Conclusión

Cultivar tu propia albahaca a partir de semillas es una forma económica y gratificante de tener un suministro constante de esta deliciosa hierba. Sigue estos pasos simples y en poco tiempo estarás disfrutando de tus cultivos caseros de albahaca.